En una operación sin precedentes, más de 1,100 inmigrantes indocumentados fueron arrestados esta semana en Florida, según informaron funcionarios estatales y representantes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). El operativo fue calificado como el más grande de su tipo en la historia del estado.
La intervención, que contó con la participación de al menos 250 agentes de agencias federales, locales y miembros de la Guardia Nacional, fue anunciada en una rueda de prensa en la que se mostraron imágenes de varios de los detenidos.
“El mensaje es contundente: te localizaremos, te detendremos y serás deportado”, declaró Jeff Denise, jefe de patrulla del sector de Miami.
El gobernador republicano Ron DeSantis también estuvo presente y aprovechó la ocasión para solicitar a la Corte Suprema que ponga fin a lo que calificó como “una farsa”, en referencia a las decisiones judiciales que han frenado algunas políticas migratorias impulsadas por la administración del expresidente Donald Trump, incluidas las deportaciones aceleradas bajo leyes antiguas de seguridad nacional.
Madison Sheehan, directora interina de ICE, señaló que la cooperación entre agencias permitió alcanzar la cifra más alta de arrestos en una sola semana dentro de un mismo estado. Además, aseguró que este tipo de operativos podría replicarse en otros estados del país debido a su efectividad.
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